Anoche,
así como muchas noches, no pude dormir. Ayer leí lo de la masacre
en Siria, donde muchos niños y niñas, algunos pequeñitos, fueron
asesinados, y vi algunas fotos, las cuales extrajeron de los archivos
en mi mente, fotos macabras, memorias del pasado. Me pasó otro
cuchillo por el corazón, y me traspasó el alma. Me decombobuló la
mente, arrancándome el gusto sabroso de la vida, como siempre ocurre
cuando leo este tipo de noticia.
Es que viví la primera
guerra del golfo (1991), donde vi de primera mano lo que los gringos
y sus aliados, esos psicópatas desalmados y endiablados, le hicieron
a la gente, a los inocentes, a los ancianos, a los niños, y eso, por
orden militar.
A menos de haberlo vivido y visto de primera
mano, nadie puede imaginarse la verdadera barbarie.
Cuando
les canté a los soldados gringos en el hotel Holiday Inn Crowne
Plaza en la ciudad de Kuwait en1991, a jóvenes de no mas de 21 años,
descombobulados, desorientados, traumatizados, me contaron lo que
habían hecho. Durante la gran operación militar estadounidense en
la región de Basra, al sur de Iraq, Desert Storm, o Tormente del
Desierto, las ordenes militares eran de disparar, para matar, a
cualquier persona que porta un arma de fuego o que parezca tener un
arma de fuego, y eso, repito, fue por orden militar.
Los que
los jefes militares no les dijeron a los soldados (infantería), era
que en la tradición de los Beduinos, aquellos indígenas que viven
en el desierto en carpas, quienes son nómadas, y que andan de lado
en lado con sus camellos y ovejas – allí en ese mundo milenario,
todos los hombres, a partir de la edad de 7 – 8 años, portan algún
tipo de arma para proteger a las mujeres y niños, y que hoy en día,
esa arma es a menudo un rifle, el cual portan como símbolo de honor,
hasta la muerte. Es decir, no solo los hombres en edad para el
combate portan armas, sino que también los portan los barones niños
y ancianos.
Cada uno de los soldados estadounidense me
contaron que habían asesinado decenas de niños y ancianos armados,
y que descubrieron, después de los hechos, que un gran numero de los
Beduinos (indígenas), ni sabían que había una guerra. Habían
asesinado así, engañados por sus propios jefes militares, a miles
de inocentes. Ademas, habían asesinado, de lejos, a un sinnúmero de
inocente pastores quienes portaban solo un palo en la mano.
No
les estoy contando un cuento de fantasía, les estoy contando la
verdad.
Por eso, estos jóvenes soldados estadounidenses, la
gran mayoría proveniente de familias muy pobres, quedaron
traumatizados, y cuando les cantaba, lloraban como bebés.
Pero
lo mas increíble del asunto es que en todas (¡todas!) las noticias
en el extranjero, le echaron la culpa de los asesinatos de niños y
ancianos e inocentes a las tropas de Saddan Hussien … y eso es
exactamente lo que están haciendo hoy en contra de Siria. Hilary
Clinton, la novia del diablo, y los países aliados del occidente, le
están echando la culpa al gobierno de Siria por las masacres.
¡Pero
son ellos, los gringos de mierda y sus aliados, tales como Canadá,
Inglaterra, Francia, y Alemania, los que dirigen las masacres!
A
los 5 años de haber regresado del Medio Oriente a Canadá, donde
nací, decidí investigar todo este mecanismo diabólico, y empecé a
escribir en contra de los gringos y sus aliados, y solo por este
hecho, los servicios secretos de Canadá (CSIS), junto con la CIA,
empezaron a casarme y a amenazar a mi familia, a mi esposa, e incluso
a mi inocente hijo, un granjero, y a mi papá, un viejito capitalista
pro EEUU.
Solo por expresarme, y por divulgar la verdad, he
pasado los últimos 10 años cazado como cualquier rata común, casi
asesinado una vez y dejado por muerto, y casi secuestrado en dos
ocasiones, un vez por la CIA, y otra vez por CSIS.
Pero ahora,
gracias al gobierno de nuestro Presidente Chávez, y gracias a los
venezolanos, soy venezolano, y vivo de manera permanente en este
bello país de paz y verdad, y por eso, le doy las gracias a
Venezuela, por permitir expresarme, sin temor de que los servicios
secretos venezolanos amenacen mi familia o traten de matarme.
Gracias.
oscarheck111@yahoo.com