El fracaso del movimiento llamado La Unidad, (MUD), nos refleja la incertidumbre del campo ideológico y el futuro incierto de las llamadas organizaciones partidistas en nuestra patria. Su poca capacidad para determinar los objetivos, llevaron a Freddy Guevara. Interlocutor de Leopoldo López, (Voluntad Popular), a un traste territorial que no pudieron controlar los objetivos trazados para controlar el poder y, el único fin logrado es destabilizar más la economía para darle un repunte a ese engendro, mal llamado dólar paralelo.

Lo único cierto es que la democracia nos refleja un campo ya madurado que exige de nuestra reflexión para ir al debate y los foros para conceptualizar un ideario que vaya construyendo el Estado Bolivariano de Venezuela y avanzar en respuestas constructivas hacia el pueblo, en este sentido, debe aclimatar las nuevas tendencias geopolíticas hacia una sola realidad, como es la participación popular, un hecho negado reiteradamente por los movimientos opositores.

El ejercicio democrático se encuentra ajeno a toda discusión política y se debe avanzar uniformemente en nuevos criterios para la sociabilidad ciudadana. Es un logro abierto hacia la no violencia.

La Constituyente, ya está aquí, bajo la mano sobria de un hombre elegido por el pueblo con un sufragio universal, dado en democracia y de la verdadera participación popular. Es lo reflejado por nuestro presidente Nicolás Maduro Moros en estos últimos tiempos, es el momento de seguir pensando en el país y adentrarse en el mundo económico a nivel universal.

Somos un pueblo, lleno de coraje, el cual desafió las barricadas de la violencia y, en el día indicado salió a votar por sus sueños, dejado s atrás por otro combatiente que en su nivel militar desafió los núcleos de poder de la vieja república y avanzo en un proceso verdaderamente eleccionario a regir los destinos del país por el camino democrático, me refiero al comandante Hugo Chávez Frías.

El fracaso de Capriles Randosky y Guevara se hizo sentir en los mismos predios del Este, como son El Hatillo, Cafetal, Sebucán y Baruta, por la entrada DE Caracas a Santa Mónica, Chaguaramos, Las Mercedes. Un aproximado de ciento sesenta mil personas votaron por los símbolos de La Paz y la hidalguía social.

El mediátismo fracasó en Venezuela, ahora resta romper con una Guerra Económica ficticia, que no existe. Hay que romper con esa mentira dada por realidad y avanzar en la regulación de los precios y congelación y avanzar en la apertura de los mercados Bicentenario, Claps y Mercal, a todos los niveles y limitar la compra de productos en los mercados mayoristas por parte de las mafias comercializadoras de alimentos tercerizadas.

Siempre ha existido, pero, existe una lucha atroz de clases, alimentadas por ambos bandos en perjuicio de la República y de los trabajadores que desean hacer vida en el país, porque, el club de la oligarquía y sus distintas manifestaciones sociales, solo desean colapsar al Estado- nación y provocar un golpe de Estado para dividir a Venezuela en tres sectores territoriales, una gobernada por Caracas y comprende la Región Central, un segundo sector alimentado por la media luna e integrada por Zulia, Mérida, Trujillo, Lara y Táchira bajo el empoderamiento de los norteamericanos y Colombia, que nos ha querido invadir desde el año 1989 y hemos tenido varios incidentes como el Caldas y un tercer territorio bajo el control de Gran Bretaña y Francia y es el Esequibo, al igual que Guayana, donde sería un triunvirato por las riquezas ya reflejadas. La idea es lograr materializar el robo de minerales para la energía nuclear.