La especie de editorial que comentó en su programa La Hojilla la noche del 28 de Julio el señor Mario Silva García, fue un verdadero atropello a la Alianza Patriótica.
El señor Mario Silva García, con esa arrogancia y sectarismo que lo caracteriza, no se cansó de lanzarles piedras a los partidos aliados que están trabajando frenéticamente en la selección del mejor candidato para las venideras elecciones.
No es posible que al señor Mario Silva García, se le haya olvidado que todos esos partidos con sus respectivos líderes y militantes, con excepción del más reciente, el de la camarada Lina Ron, tienen tradición; atomizada sí, pero tradición al fin, de lucha revolucionaria.
¿Cómo cuestionar, por ejemplo, la trayectoria por décadas del Partido Comunista de Venezuela? Este partido y sus líderes antes que este animador de televisión naciera, ya enfrentaban al sistema capitalista; ya tenían historia y abolengo revolucionario.
De igual manera, ¿cómo cuestionar las luchas por los más necesitados que libera la señora Lina Ron? Que se haya equivocado a veces ¡es de humanos¡ pero de ninguna manera desvirtúa su esencia revolucionaria. Lina, ha demostrado apego al proceso y como ya lo expresamos tiene tradición y trayectoria revolucionaria. De tal manera, que cuestionar como lo hizo este señor, en esa noche infame de La Hojilla, a esta revolucionaria, es mezquino y desconsiderado. ¿Cómo viene este caballero, el señor Mario Silva García, a descalificar a Lina Ron en su condición revolucionaria por el simple hecho que ella mantenga diferencias de criterio con él; o porque Mario Silva García no comparta su estilo? Nunca hemos visto a este “líder político” Mario Silva García, como lo hace Lina, pateando calle. Nunca hemos visto a este señor encabezando, ni siquiera, una marcha en protesta de algo o contra algo. No lo hemos visto, ni lo veremos jamás, porque para Mario Silva García, salir a denunciar algo que afecte la imagen del proceso, así sea cierto, así tenga asidero, sería ganarse la mala voluntad presidencial.
En esencia, un hombre así, es un hombre sin criterio político definido.
Nos preguntamos: ¿Dónde estaba el señor Mario Silva García, por ejemplo, el día que el comandante Chávez abandonó la cárcel de Yare? ¿Alguien lo sabe? ¿Lo llegó a visitar durante su encarcelamiento?
Sabemos sí, que muchos de estos líderes, de los llamados partidos tradicionales de izquierda, sí lo hicieron.
Todos estos líderes junto con su militancia, esperaron a Chávez a las afueras de Yare y con él, salieron a recorrer pueblos; kilómetros de patria y se unieron y formaron el llamado Polo Patriótico junto con el Movimiento V República y sumando y no restando voluntades, como pretende hacerlo el señor Mario Silva García, llevaron a la presidencia a Hugo Chávez, cuando este señor, Mario Silva García, era un desconocido en el mundo político; es decir, era polvo cósmico.
Esto nos lleva a preguntarnos. ¿Dónde está, entonces, la trayectoria política de este animador de televisión hoy convertido por la voluntad popular del P.S.U.V. en flamante candidato a la gobernación del Estado Carabobo? ¿Dónde está su curriculum político? ¿Alguien lo conoce?
¿Con qué derecho el señor Mario Silva García viene a tirarles piedras a los aliados políticos del proceso? ¿Quién le ha dado esa potestad? ¿El Presidente? no lo creemos.
De él sabemos que fue empleado del Bloque D´Armas y su jefe fue, así lo ha dicho él, no yo: Andrés D´Armas. Es más; ha dicho cuál era su cargo: Gerente, por allá por el Estado Trujillo. Es decir, formó parte de los medios ¡y de qué medios! y por ende, usufructuó el capitalismo.
¿Cómo le quedaría el ojo al señor Mario Silva García, cuando Diosdado Cabello, a través de la televisión y en rueda de prensa, acompañado y rodeado de todos esos líderes de izquierda que él atacó la noche anterior en su programa, entre los que se contaban Eustoquio, Lina y José Albornoz, ratificaban su apego al proceso revolucionario reconociendo el liderazgo del Comandante Presidente? ¿Cómo le quedaría su espíritu, cuando Diosdado Cabello enumeró diez Estados de Venezuela en donde hay consenso con los aliados, y el Estado Carabobo, en donde este señor, soberbio y radical es candidato a la gobernación, no figuró entre ellos?
Exhortamos al señor Mario Silva García a que deponga su actitud hostil hacia los camaradas revolucionarios que acompañan el proceso y que forman parte de la hoy llamada Alianza Patriótica.
Mario Silva García, ha sido exitoso en desenmascarar la mentira mediática a través de su programa y esto le ganó la simpatía de los seguidores del proceso y la simpatía presidencial. Esto lo catapultó de un estudio de televisión al mundo político sin llenarse de polvo sus zapatos; sin enfrentar la policía represora de la cuarta ni sus desapariciones como lo hicieron estos partidos, sus líderes y militantes, a los cuales, al final, es a quienes irrespeta Mario Silva García con sus desafortunados comentarios.
Enérgicamente le solicitamos; le exigimos, al conductor de La Hojilla, no sacar provecho de su ventajismo comunicacional del cual está haciendo un mal uso atacando la tan ansiada unidad que nos llevaría a la derrota en noviembre, derrota, que lo alcanzará a él mismo.
Una vez más pana, te quedó mal, señor Mario Silva García.
¡El que tenga oídos, que oiga!
(*)Médico
elieceralvarado@hotmail.com
