Las bases militares norteamericanas en Colombia, Panamá y las antillas holandesas es la culminación de la primera fase del plan que la inteligencia norteamericana y el gobierno colombiano vienen desarrollando desde hace mas de 5 años, luego del triunfo del Comandante Presidente Chávez en el revocatorio en el 2004.
El plan consiste en vincular a las FARC y Al Qaeda en planes comunes para crear un proceso de violencia y de caos, tanto en EEUU como en América Latina, esto es la madre de los falsos positivos o lo que es lo mismo, la madre de la simulación de hechos punibles, lo cual tiene como objetivo final controlar para siempre las inmesas riquezas energéticas, la biodiversidad y las reservas de agua que posee Venezuela y Latinoamérica .
Así como los preceptos doctrinarios de la “doctrina de seguridad nacional” en la década de los años setenta identificaron al “subversivo” como el principal enemigo de la “libertad” y el “orden”, la nueva doctrina sitúa al “terrorista” como la fuente del “caos” y la “violencia” que amenazan por igual a toda la región, por ello, en diversas exposiciones ante el Comité de Inteligencia del Senado norteamericano, la CIA y el Mossad israelí han insistido en que las “células clandestinas” de la red Al Qaeda, los “terroristas” de las FARC, y las ambiciones nucleares del régimen de Irán, son las principales amenazas que enfrentan los intereses de EEUU en el mundo.
En ese sentido, esta estrategia busca entoces instalar la “guerra contraterrorista” global en América Latina mezclando a gobiernos de izquierda de Latinoamérica (Venezuela, Ecuador, Bolivia y Nicaragua), las FARC y otras organizaciones armadas de Colombia con planes del “terrorismo internacional” orientados a vulnerar la seguridad nacional de EEUU y a desestabilizar toda la región, de alli la conveniencia del falso positivo que pretende el gobierno colombiano llevar a cabo en la frontera con Venezuela, mediante el ataque a un campamento fantasma de las FARC en territorio venezolano.
Sin embargo, no debemos olvidar que detrás de Uribe se agazapan los paramilitares, el negocio de las drogas (fuente de muy altos ingresos para EE.UU y Colombia), la prostitución, las mafias y las armas, y con estos la invasión a Venezuela por delincuentes, constructores clandestinos de ranchos, ambos con el objetivo de crear caos, exacerbar la inseguridad en Venezuela y crear la sensación que Venezuela va hacia un Estado fallido, todo ello lamentablemente apoyado por una oposición apátrida.
Una manera de contrarrestar a Uribe y a la oposición apátrida es arreciar la lucha contra la impunidad, el narcotráfico, la inmigración ilegal, la construcción indiscriminada de nuevos ranchos en los barrios mas pobres de Venezuela y difundir los resultados de la misma a nivel mundial. Estos son objetivos de altísima prioridad nacional, ya que de no desarrollarse con fuerza, por allí pudiera irse a pique el barco en la que navega nuestra Revolución Bolivariana y Socialista.
(*) Trabajdor Jubilado del MPPCTII
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