Vi por la TV a Marcela Máspero dirigente de la Unión Nacional de Trabajadores (UNT) haciendo una serie de denuncias, dice ser chavista hasta los tuétanos y denuncia hechos y conductas de funcionarios que de ser ciertas cualquiera se convence de que este gobierno es el non plus ultra de la corrupción y que con él el legado de Chávez está perdido, acusa de frente a altos funcionarios de las empresas llamadas de producción social, que dice, las tienen prácticamente en quiebra, son según ella, además de redomados burócratas, habitantes del Country Club, bebedores diarios de whisky 18, con sus hijos estudiando en el Colegio Francia y viajando al exterior a darse la gran vida, mientras pisotean los derechos de los trabajadores, dice que es tanto el abuso y son de tal calibre las acciones anti revolucionarias de estos personajes, que llega al extremo de pedir la renuncia del Vicepresidente Ejecutivo Jorge Arreaza a quien hace responsable por sus designaciones y mantenimiento en sus cargos, a pesar de que es pública y notoria la falta de gerencia y da como ejemplo Cemento Andino que según ella va para atrás como el cangrejo, con una productividad cada vez mas exigua, igual denuncia el sector de la producción de azúcar y critica como engaño brutal el que en las listas de precios de vehículos en la que supuestamente se iban a colocar precios justos, estos a diferencia de otros países siguen escandalosamente altos y da como ejemplo el de un mazda que cuesta 500 millones de bolívares, de los viejo, crítica ésta por cierto generalizada, pues en verdad, de ser así como ella lo platea, la tan cacareada oferta hecha por el gobierno de darle un parao a la especulación con los vehículos, ha sido un fiasco y no puede recibir otro nombre que el de oferta engañosa, y entonces habría que darle la razón a la derecha que siempre dijo que eran anuncios con intenciones electoreras, y de ser así no quiero ni pensar en un desencanto que sería un duro golpe para este proceso, que no se lo merece y menos cuando pensamos que por él dio la vida un ser excepcional como el presidente Chávez.
Cuando desde la oposición, por sus medios nacionales y foráneos se hacen señalamientos que de ser ciertos serían de una enorme gravedad, prácticamente se desechan por venir de donde vienen, pero cuando esos señalamientos provienen de una dirigente nacional que afirma que tiene las pruebas de lo que dice en sus manos, hay que detenerse a reflexionar si en verdad dentro de la revolución, hay gente que le esté haciendo tanto daño al proceso y que con su conducta esté sembrándole minas a lo construido durante los 14 años, en que el comandante eterno estuvo frente al timón, y que de repente un día esas minas exploten y arrasen con tantos sacrificios de muchos que sí han creído en que otro mundo es posible.
Pienso que si el Presidente Maduro quiere hacer honor al legado que quedó en sus manos y a la imagen que nos ha trasmitido de ser el primer presidente chavista de este país, debería dedicarle un buen rato de su tiempo a oír esta dirigente, recibirle sus denuncias, investigarlas y tomar de manera urgente los correctivos que sean necesarios, no olvidemos que fue Chávez quien nos exigió denunciar y criticar la cosas erróneas, que como contralores sociales que somos todos, veamos lo que está sucediendo en la revolución, es la mejor manera de ayudar a que ésta no se nos vaya de las manos y evitar que suceda con ella lo que ha pasado con otros intentos a lo largo de la historia, pero también a que las equivocaciones y errores superen los aciertos, hasta el punto de que la tan repetida tesis contrarrevolucionaria de que esta revolución es inviable se convierta en una dolorosa verdad.
Estamos a tiempo, el pueblo el 08 de diciembre del año pasado le dio otra oportunidad, no sólo al proceso, sino más que todo a quienes están al frente de, que bien pueden pasar a la historia como dignos sucesores del gigante o simple y dolorosamente como quienes dejaron morir una revolución, en estos momentos y aún, convertida en faro de luz y esperanza del mundo.