Aplicar las 3R al cuadrado, supone una aguda y profunda revisión en todos los ordenes. No conduce a fijarse única y exclusivamente en el tema administrativo o de gestión. Aplicar las 3R al cuadrado, supone retroceder un poco en el tiempo y tener a la ética como el criterio o filtro rector de la revisión. Este echar un ojo hacia atrás y utilizar la ética como un criterio rector no debió haber fallado en la equivocada aplicación de la 3R pasadas y no debe faltar en la aplicación de esta nueva versión de las 3R al cuadrado. La ética o falta de ética sirve para explicarse: ¿Cómo el Alcalde y gobernante concibe o concibió su proyecto de vida una vez electo? ¿Cómo asumió, organizó y concretó una gestión de gobierno?
Si la ética está presente en el sentir del Alcalde y de su equipo de gobierno, aunque las cosas vayan mal; la ética sirve de equilibrio. Si por el contrario; el Alcalde o Alcaldesa con su equipo de trabajo tienen un proceder distinto a las pautas que sugiere un comportamiento ético, las fallas se multiplican y no hay manera de ocultarle. Los contrastes son mucho más visibles.
Ver un Alcalde o Alcaldesa con ausencia de ética y si al verlo, agudizamos los sentidos y nos fijamos en los detalles, entenderemos de la razones de la basura en las calles, las vías destartalas, el trasporte público hecho un caos y el aspecto que muestra la ciudad. Entendemos sin mucho esfuerzo, el caos urbanístico. Comprenderemos totalmente el desorden en las ciudades y el abandono de las comunidades.
¿Cuánto Alcaldes, Alcaldesas, Ex Alcaldes y Ex Alcaldesas “revolucionarios(as)” conocemos? ¿Dónde vivían esos Alcaldes, Alcaldesas, Ex Alcaldes y Ex Alcaldesas antes de ser electos y dónde viven en estos momentos? Seguro estoy, que sabíamos donde vivían, pero ya le perdimos la pista. Pregúntale a un Alcalde o Ex Alcalde(sa), por qué se mudo de donde vivía. Tengan la absoluta seguridad que oirán: tengo derecho a mejorar de vida. Ciertamente, tiene derecho a mejorar de vida y ahí salta la ética y nos interroga: ¿y por qué razón, mejorar de vida implica irse a una lujosa quinta en zona residencial de clase media alta? ¿Porqué mejorar la vida no se hace ahí en la comunidad donde uno compartió parte de su vida? Ahí se expresa una falta de ética general y más concretamente se observa una falta de ética revolucionaria. Mudarse antes o después, y no tener cargo fijo y vivir como viven, ya hay prueba de un torcimiento de ruta y valores aunque su cuentas bancarias estén en cero. A pesar de esa señal, continúan siendo candidatos y la estructura partidista continúa dándole el visto bueno.
II
No dispongo de una referencia más o menos argumentada sobre el funcionamiento de las Alcaldías en el estado Anzoátegui y con esa limitación, me propongo hacer unas sugerencias
1) ¿Hay Plan de Gobierno Municipal?
Por disposición del CNE, todo candidato o candidata a una Alcaldía debía presentar una propuesta de gobierno. Cabe en esto una primera pregunta en la revisión: ¿Cuántos de los Alcaldes o Alcaldesa revolucionarios(as) tienen su plan de gobierno municipal? Tengan la absoluta seguridad que la propuesta entregada al CNE fue un documento general y jamás se transformó en un Plan Municipal como lo exige la L.O.P.P.M. Los Alcaldes y Alcaldesa se acostumbraron a trabajar con el principio –nada científico y revolucionario- de “cómo vaya viniendo vamos viendo”. Las 3R implican imponerles a los Alcaldes y Alcaldesa de Anzoátegui la necesidad de tener un pequeñito plan de gobierno municipal en el cual se incluyan los problemas y se establezcan prioridades.
2) Seguimiento y Evaluación
Aplicar las 3R debe producir una conclusión sencilla y elemental: Si no hay plan Municipal, la falta de seguimiento y evaluación es una constante. Cualquiera cosa cabe y una prioridad puede ser traer a José Luis Rodríguez o Oscar de León para un bonche de carnaval: Palo y circo. Sugiero entonces, que el buró político de mantenerse en pie, conforme e instale una comisión de seguimiento y evaluación con la finalidad de producir una vigilancia constante al plan de gobierno que los Alcaldes y Alcaldesas deben preparar y donde las prioridades deben verse muy nítidamente.
3) Reuniones sectoriales
Tengo la impresión que en las Alcaldías como en todos los niveles de gobierno, las unidades administrativas no se encuentran y muchas veces se solapan actividades. El Alcalde o Alcaldesa, como jefe de gobierno deben designar a una persona responsable por los RESULTADOS del plan y ese responsable, debe con cierta regularidad producir reuniones sectoriales para unir esfuerzos y voluntades y afrontar mejor los problemas. Parece una medida elemental, si nos acordamos que hace miles de año, un señor propuso el principio de la palanca o el apalancamiento.
4) Lo Organizacional
Previo a todo lo anterior, es importante preguntarse: ¿Con esta Alcaldía y su organización puedo afrontar los problemas del Municipio? No se trata de plantear una restructuración, simplemente se intenta conocer, si ese esquema o estructura organizativa ayuda a la solución de los problemas o los recicla. No se sugiere ponerle nombre nuevos a las unidades; lo importante y clave es pensar y trabajar en función de RESULTADOS DESEADOS y asignar responsabilidades en función de objetivos y metas. Las unidades administrativas deben tener muy claros que RESULTADOS deben producir
5) Un Alcalde Articulador
En vez de un alcalde o alcaldesa estar interesado o centrado en cambiar de vida y parecerse lo mayor posible a un representante de la clase media alta; el jefe o jefa del gobierno municipal debe designar a un responsable por los RESULTADOS previsto en el plan y él, como jefe o jefa de gobierno debe concentrarse en ser un articulador de políticas. Esa función de articulador lo obliga a dejar la rutina burocrática y concentrase en promover, producir y concretar estrategias que le permita captar apoyo para problemas que no puede resolver con sus recursos y hacerle seguimiento a las prioridades que decidió atender.