No habían pasado días de las primarias, aún en medio de los vapores de la discusión, y ya quedó demostrado que las elecciones burguesas son el opio de los pueblos. El capitalismo es muy zorro, enfrentarlo no es fácil, muchas son sus armas. Las generaciones revolucionarias futuras tendrán que estudiar con atención a la Revolución de Chávez para entender qué mecanismos usa el capitalismo para capturar el intento revolucionario.
Uno de sus objetivos fundamentales es la vanguardia, el líder; saben, como dijo el clásico, que "un pueblo se mueve en el rumbo trazado por la vanguardia", y contra ella enfilan sus mejores armas. Estimulan la tesis de lo inconveniente de la vanguardia, difunden la idea de que la masa actúa mejor sin ella, sin líder, dicen: "las bases sabrán qué hacer", "la vanguardia es dictadura", "viva el espontaneísmo". Claro que el capitalismo no cree esta tesis, tiene su organización, su Estado, forma a sus líderes, su vanguardia propia que es la que difunde la idea de que los humildes no la deben tener.
Cuando las circunstancias, como tiene que ser, impelen a la formación de la vanguardia, entonces la atacan sin cuartel, desde dos frentes principales: uno, intentan acabarla físicamente, usan el magnicidio, el asesinato; y el otro frente, intentan seducirla, engañarla, extraviarla. El esquema no es invento, lo han aplicado en el mundo, no fueron casualidades los más de seiscientos atentados contra Fidel, allá no pudieron capturar esa Revolución.
Aquí en Venezuela aplican el esquema con precisión, no fue casualidad que asesinaran al Comandante y luego extraviaran a la dirección impidiendo que fuera vanguardia, la convirtieron en agente de la restauración del capitalismo. La dirección que Chávez dejó está en situación privilegiada para continuar el camino del Comandante, el pueblo leal a Chávez la sigue, pero también está en situación privilegiada para truncar el proyecto que se venía fraguando bajo la tutela del líder Chávez.
El proceso está desarrollándose frente a nuestros ojos, las elecciones primarias ilustran cómo la dirección distrae a la masa y restaura al capitalismo.
En las elecciones votaron más de tres millones, el gobierno dice que han podido ser ocho millones, y además añade que son votos del Socialismo, de Chávez, así se propuso la elección. Luego de las elecciones viene la discusión, el cuestionamiento. Mucho se ha escrito a favor o en contra de la visión del gobierno, los actos de proclamación de los candidatos son ceremoniosos, la dirección salta de alegría y alardea de fuerza titánica. Ahora bien, mientras los vapores electorales todavía no se asientan ocurre un hecho de importancia histórica que no percibe la masa embriagada y la dirigencia atontada o engolosinada de triunfo. Veamos la noticia:
"Este miércoles se celebró una nueva jornada de trabajo entre representantes de Pdvsa y Fedeindustria para supervisar los avances de los proyectos para la industrialización de la Faja Petrolífera del Orinoco “Hugo Chávez Frías”
En la reunión participaron el presidente de Pdvsa, Eulogio Del Pino, junto al de Fedeindustria y comisionado Presidencial para el Estado Mayor Económico, Miguel Pérez Abad y el presidente de Fedeindustria Anzoátegui y también Director Nacional de Fedeindustria para la Faja, J.J. Fermín, todos representantes del sector industrial y coordinadores de estos proyectos.
Durante el acto se confirmó la participación de Eulogio Del Pino como ponente en el Foro “Nos Fajamos por Venezuela”, organizado por Fedeindustria con el objetivo de conocer los planes y proyectos de la Faja Petrolífera del Orinoco “Hugo Chávez Frías”, y la inserción de los pequeños y medianos industriales en ellos.
Se conoció que al finalizar este foro se firmará el Acuerdo Marco de Cooperación entre Pdvsa y Fedeindustria para la inclusión de los pequeños y medianos industriales que ofrezcan soluciones a la demanda de bienes y servicios en la Faja, y además se harán anuncios importantes con respecto a la industrialización".
La noticia es fundamental, se trata de la definición del rumbo real de la Revolución, de la economía, de la reafirmación de relaciones económicas capitalistas que sustentarán la conciencia capitalista. Se trata de una operación en contra del Socialismo, una “puñalada por la espalda” que la burguesía le da al sueño de Chávez. Se les está dando entrada a los capitalistas, no en cualquier cosa menor, sino en la Faja del Orinoco, el lomito del petróleo, que además y muy simbólico lleva el nombre del Comandante Chávez, descaro por donde se le vea.
Pobre Chávez, ya no puede preguntarles a sus ministros “¿dónde está el Socialismo?”
La dirección, mientras plantea elecciones con consignas falsas, sigue su rumbo hacia el capitalismo, el Presidente sigue rogándoles a los empresarios que se reúnan, el comisionado Presidencial para el Estado Mayor Económico es un empresario. Y los tres millones, o quizá ocho millones, siguen votando ¿leales o engañados? por el Socialismo, por Chávez
Razón tenía el clásico: "un pueblo se mueve en el rumbo trazado por la vanguardia"; y añadió: "una Revolución irá adonde vaya su economía".