Lo que pudimos apreciar en Miami el día sábado 14, en el juego de beisbol entre Holanda y Venezuela, referente a la actitud de un grupo de disociados sicóticos, es digno de ser estudiado y analizado por profesionales de la siquiatría.
Maglio Ordoñez, grande liga, eximio deportista del beisbol, fue campeón bate, de un humanismo infinito y solidario con el gobierno socialista que lidera el comandante Chávez, supo en forma brillante e inteligente obviar a estos apátridas que no cesaron de abuchearlo y de lanzarle los epítetos más viles demostrando el odio que sienten por nuestro Presidente, y la Patria que los parió.
Estos disociados, son los mismos que se tomaron la embajada de Cuba para el golpe de Estado, son los mismos que vejaron al ex –ministro Rodríguez Chacín, son los mismos que agredieron al Gobernador Tareck William, son los mismos que allanaron la habitación del ex –alcalde Bernal, son los mismos que paralizaron PDVSA que nos dejaron sin gasolina, sin gas, sin hallacas, son los mismos que incendiaron el Waraira Repano, que son sinónimos de apátridas y fascistas.
Estimados e incondicionales lectores de Aporrea, quiero llevarlos a recorrer un camino sinuoso de un supuesto negado: ¿QUÉ PASARÍA SI ESTOS ENFERMOS MENTALES TOMARAN EL PODER?, respondo: creo sin temor a equivocarme, la dictadura ejercida por el demente y genocida de Pinochet, sería un bebé de pecho al lado de lo que harían estos disociados sicóticos.
¿Será posible un entendimiento, un diálogo, con estos facinerosos, como han planteado algunos compatriotas?
Sería un innoble, de no destacar la solidaridad de la Selección de Venezuela, jugadores, cuerpo técnico, con Maglio Ordoñez, quizás algunos de ellos no simpatizantes del proceso revolucionario que se está construyendo en Venezuela, pero ante todo primó el gentilicio de ser venezolano.
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