Un solo pronunciamiento ha
tenido el presidente Obama desde el inicio de este golpe gorila
en Honduras, nada tajante, tan sólo con voz tibia para informar
que Estados Unidos apoya sólo el camino democrático.
Los golpistas de
Honduras parecieran sordos y mudos: ellos tampoco se han esmerado
en explicar nada al mundo.
Obviamente estamos en presencia
de un ensayo. ¿Cómo reaccionan
los países de centro y suramérica para cambiar o lograr acciones
sobre los acontecimientos? En el globo de observación, con un silencio
absoluto luego de su no reconocimiento, los países del primer mundo
se sientan en sus acolchadas butacas a ver la película: ¿Qué son
capaces de hacer los señores del Sur?
Un pueblo solo en las calles,
que resiste, se está atragantando de gases lacrimógenos y de miedo,
precisa urgente que algo suceda, el silencio y la demora juegan a favor
de los señores imperiales.
Los líderes de centro y
Sur América continúan hablando. ¿Se pueden esperar los resultados
de la huelga general?, mientras hablaban, los encapuchados fascistas
secuestran y deportan las piezas claves que le quedan a la resistencia
mediática, a la cancillera, el equipo reporteril de Telesur
que ya ha sido secuestrado, lo que seguramente se puede entender es
que muy pronto desembarcarán de un avión en algún país del Caribe
o le serán decomisados sus equipos, la emisora de radio Globo fue allanada
y silenciada y así avanza la asonada, cuidándose sólo de no dar excusa
para una intervención militar de los países reunidos en nicaragua.
Pocas son las noticias alentadoras, dos regimientos que se sublevaron en la costa norte de Honduras, una emisora de televisión transmitió al país imágenes de la represión frente a la casa presidencial. Pero luego una lluvia de bombas lacrimógenas avanza contra los civiles que estaban en vigilia frente a ella:
obviamente los hacen retroceder…
Todo me hace pensar que es
un ensayo de poderes para definir futuras políticas del pentágono
sobre todo el continente y también con más urgencia, entonces, los
países del sur deben tomar, no políticas, sino acciones importantes.¿
Hasta donde la no violencia puede ser un arma para enfrentar a una reedición
de golpes militares? Latinoamérica no debe contar con la ética internacional,
ésta no corresponde sino a los intereses geopolíticos, ya no a los
valores morales, la dignidad es lo primero que se pisotea en un enfrentamiento
y ellos no tienen prisa, nosotros si.
Démosle gusto a la audiencia,
actuemos y hagámoslo bien. En la frontera con Honduras se podría
iniciar la retoma del mando de Zelaya, debe ir a hablar con
los soldados, pararse en la puerta de su casa, seguramente que toda
Honduras saldrá a recibirlo, el rumor será indetenible: Manuel
Zedillo entra a Honduras junto a una caravana a la que en la marcha
se le suman multitudinariamente los campesinos y los pobladores de los
países amigos. Se levantarán los cuarteles o las jóvenes generaciones
de militares podría, como le acaba de proponer Hugo Chávez:
irse al corazón del imperio y tocar la otra puerta: la de Obama.
Una u otra cosa pero algo hay que hacer para que algo pase, no
se puede congelar la imagen.
Mientras más rápido nuestros
escritos pierdan su vigencia, mientras menos lectores tengamos porque
las novedades nos pasen por encima, estaremos haciendo lo correcto.
Si ellos observan en
silencio experimentado con las teorías de ensayo y error, que es la
versión americana de la enseñanza de nuestro Simón Rodríguez,
la acción, pacífica o no, ya ellos fueron los primeros en usar la
violencia y se puede ser violentos, lo que no se puede es ser pendejos:
o inventamos o erramos.