Pero como le van a exigir peras al horno si el horno está recalentado
con la llegada del filósofo zuliano al país que, adelantó su venida
con ganas de rumbear un poco al son que ellos quieren, tal cual, su
modo de pensar, lo que viene es de película y como irresponsables
telúricos hay del bando de ellos como del nuestro se hace imposible
enderezar el rumbo, un poco perdido con las próximas elecciones del
6D.
Quien tenga cuatro dedos de frente no se embarca en firmar, lo que no
se puede garantizar que, hasta razón tendrán si aducen que siempre que
hay elecciones votan más los muertos que los vivos y, lo peor que
votan por los del gobierno y muy pocos por la oposición, es decir que
el que se muere, quiérase o no, haya sido de la oposición en su reposo
cambia de parecer y, pone a valer su voto al contrario, por lo que
ellos no entienden la máxima, acta mata voto.
Además, todas las trampas habidas y por haber, salen al descubierto
cada vez que hay elecciones nacionales y, el CNE como el gran
conductor de ellas, no hace nada por el bien de la oposición y eso da
hasta vergüenza que la Patria camine de un sólo lado y, ellos siempre
en el limbo de los escrutinios que de antemano lo saben que van a
perder, por lo que firmar, para qué, si eso de firmar es un estrago
que en nada los divierte y, como los especialistas de la MUD, incluido
Ramos Allup, han pasado su informe eleccionario negativo en que ellos
quedan fritos siendo mayoría como piensan y como mayoría no les da las
ganas de complacerlos, para que luego canten victoria fraudulenta y,
entonces, que les queda si nunca dan con el fraude, cantar robo
incómodo de una vez, aunque incomode su malestar.
Otra situación bien engorrosa que complica el panorama electoral es
que, como las elecciones para diputados, mucha gente no le da la
importancia que se merecen, no van a votar y, a quién satisface tal
motivación al gobierno, porque voto que no se ejerce automáticamente
pasa a manos del gobierno a través del CNE y, entonces, se debe firmar
algún papel no, eso sería como dar un cheque en blanco y, como está la
situación mejor es esperar y ver, ah, pero si llegaran a ganar serían
una limpias elecciones de lo contrario no, es qué acaso este país es
Suiza u otro parecido, que va, acá somos caimanes del mismo pozo que
es mucho decir.
Otra cosa sería si el CNE estuviera en manos de rectores de los
partidos de oposición, ojos cerrados acatarían los resultados,
cualquiera él mismo, pero como los rectores que tenemos no le caen
bien ni meten sus manos al fuego político por ellos como quisiera
Ramos Allup que, fuera un CNE adeco como cuando, Morales Bello, era su
representante interno que se decía y se hacía lo que ellos fijaran
-qué tiempos aquéllos cuando en este país había democracia
participativa bien confiable por cierto-.
Será posible que en lo adelante firmen un acuerdo de aceptación y de
respeto según los resultados, pues no, la luz que guía su camino está
difusa como difuso su pensamiento que hasta el presente no hay nada
que no les indique que ya perdieron sin perder, lo que los desanima
con toda la mala intención del mundo que hay un fraude en puerta
ardiendo que, no los va a agarrar fuera de base y, como tal, postergan
la firma de hoy no, posiblemente en un futuro cuando la fuerza de la
oposición se haga valer a lo macho.