¡El pueblo pa la asamblea...pero de verdad!

Este domingo 26 la Revolución se juega muchas cosas. Se juega perder la mayoría calificada tan lamentablemente desaprovechada por la AN en los últimos 10 años (no lo digo yo, lo ha dicho el Presidente Chávez en incontables ocasiones) y tener que comenzar con el jueguito macabro del cabildeo y la negociación para aprobar leyes que, producto de ello, serían más chucutas (entiéndase reformistas) que de costumbre. 

Se juega la posibilidad real de que, de una vez por todas, el Pueblo llegue en verdad a la Asamblea, más allá del burgués sistema representativo que heredamos de la Cuarta. Que se puedan aprobar leyes sin estar pensando en la reacción de la Reacción, preocupados por lo que la Derecha nacional e internacional puedan decir. Se juega la posibilidad de reformar o hacer una nueva Ley de Ejercicio del Periodismo, y de promulgar otras leyes sobre la propiedad de los medios, o para regular a la díscola y silvestre prensa escrita, a la que nadie regula en su pornográfico accionar. 

Se juegan muchas cosas, pero en especial podríamos perder una herramienta vital para impulsar la Revolución, que necesita leyes revolucionarias para cambiar la superestructura jurídica que se desprende del Estado burgués y que hoy está vivita y coleando, en ministerios y bancos estatales, en juzgados y tribunales, en decretos y normas, en actitudes y acciones del día a día. 

Hemos logrado mucho, y aún hay mucho que mejorar. Las críticas seguirán fluyendo y los procesos deberán mejorar. Pero si no logramos la mayoría en la AN, sería el comienzo del fin de la Revolución, y este país no soporta un regreso al pasado. No sin toneladas de agua y mentiras para lavar la sangre que sería derramada por un Pueblo que se acostumbró a ser retrechero, al alzar la voz, a protestar sin temer al exterminio. 

Citemos aquí la respuesta que dimos ante el comunicado fascista publicado el 27 de junio, Día del Periodista, en los diarios Panorama y La Verdad, por los integrantes de las cúpulas directivas del CNP Zulia y CNP COL, una muestra de lo que este país enfrentaría de volver a la ignonimia pasada:  

"No lograrán amedrentarnos y seguiremos en pie de lucha, porque hoy este es un país democrático, más democrático que nunca, y la Constitución y las leyes nos permiten exponer libremente nuestras ideas y propuestas, así como se lo permiten a la directiva del CNP, la cual debería recurrir a la sana batalla de ideas y no a amenazas veladas, propias de un pasado que el país ya superó y al cual no regresará jamás". 

Nos hemos acostumbrado a las libertades que tanta sangre y muerte costaron, como quien se apoltrona y da por sentada su comodidad. Pero ellas pueden desaparecer, y pasarán años para que puedan regresar, si es que logran hacerlo. 

A votar todos el domingo, a lograr los 110 votos de la mayoría calificada, para luego ir todos, como un solo hombre y una sola mujer, como Pueblo, a reclamar ante la Asamblea la Revolución. No importa si el candidato nos parece malo: nadie descarrila un tren por tener un tornillo defectuoso. El tiempo de reparar es infinito, pa' lante es pa' allá.

Docente UBV Zulia/Periodista MPR Fabricio Ojeda

periodistasrevolucionarios@gmail.com



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Rafael Boscán Arrieta

Periodista y Docente universitario

 boscan2007@gmail.com      @raboscandanga

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