La izquierda en Francia, no estaba muerta, estaba de parranda. O la guerra civil en Francia

Sorpresa para la derecha europea y mundial con los resultados de las elecciones en Francia, la izquierda existe en Francia. Y existe por una sola razón, las demás serian secundarias: la unidad. La izquierda logro una unidad cuando se encontraron ante la necesidad de sobrevivir y evitó los esfuerzos que todo el tiempo hacen las organizaciones derechistas, políticas e institucionales de mantenerla separada. Y es que la derecha se dejó llevar por lo que ahora vemos claramente como una alucinación: todo el espectro político es de derecha.

Ese espectro político que nace en Ucrania y que se extendió por toda Europa bajo la dirección de la OTAN y las creencias norteamericanas, iría desde la derecha más tradicional hasta la más extrema terrorista y judía mata palestinos. Pero no, la izquierda en Francia existe y en algún momento también se verá en los Estados Unidos, porque para no existir tendría que desaparecer la explotación y los explotados, lo cual solo será posible cuando no existan los explotadores. Y cuando desaparezcan explotados y explotadores será el fin de la lucha de clases, el surgimiento de un nuevo tipo de estado desconocido.

Atacar esta unidad por las más elaboradas y pérfidas estrategias comunicacionales es una tarea que ya inició el imperialismo mundial, no vaya a cundir el ejemplo y se unan los pobres de la tierra en una sola propuesta revolucionaria.

Pero quien o que podía evitar la extinción de los dinosaurios y de otras bestias prehistóricas. ¡¡Nadie ni nada!!

Es así que en estas elecciones en Francia, la izquierda ha demostrado que, a pesar de los pronósticos desfavorables y las críticas constantes sobre su supuesta desaparición, sigue teniendo una presencia en la política francesa, en la europea y de refilón en la mundial. No solo tiene presencia sino que esta es relevante, definitoria, porque acabó con las refinadas políticas de dominio, de guerra, de repartición de bienes y voluntades que la burguesía norteamericana elabora para sus siervos derechistas europeos. Porque los políticos de derecha europea eso es lo que son ¡Jala mecate de los gringos!

Y toda esa derecha se regocijaba con los escenarios que construía para supuestamente asustarse, ¡Gana Le Pen!, ¡Gana la extrema derecha! Como si todas no fueran iguales a la hora de la verdad. Pero Le Pen no solo no ganó sino que quedó en un tercer lugar soñando con que está cerca su toma del poder galo.

Pero la insurrección derechista se inició apenas se dieron los primeros resultados electorales, pues ahora tratando de sabotear, utilizan enardecidos manifestantes contra su propio sistema porque no les permite dominar y explotar libremente al pueblo francés y salen vandálicamente, como hace aquí y quiere hacer María Corina y su gente y que espera repetir la tarde del 28 de este mes, destruyendo todo, quemando, matando.

Y ya amenazaron a los ganadores: la insurrección de derecha durará mientras la izquierda este en el gobierno. Como dicen aquí: ¡hasta el final! Una sola estrategia en todas partes, ¿será coincidencia o alguien los coordina?

Es que estos resultados electorales han dejado en evidencia que la izquierda no estaba muerta, simplemente había estado en un periodo de asimilar y soportar tanto golpes y derrotas, de los que solo puede protegerse no transigiendo con los derechos del pueblo, manteniendo claro el objetivo de su liberación, y aunque en el camino haya que hacer alianzas necesarias, le permitirá ganar la influencia y la ascendencia que antes tuvo en el pueblo francés.

Para crecer y mantenerse, como decía Moisés Moleiro como una opción de poder, debe afrontar sus políticas identificadoras, propias, exclusivas, privativas, haciendo sentir al pueblo francés la fuerza de la masa, la participación, el protagonismo popular y por lo tanto sembrando conscientemente, claramente, la doctrina del cambio profundo que significa en todos los aspectos un verdadero gobierno de izquierda, intransigente en eso de defender los derechos del pueblo francés. Por eso la unidad de todos los sectores populares debe mantenerse en base a estas consignas-principios y enfrentando por engañosas y explotadoras las consignas de la derecha en todas sus modalidades. El pueblo de Francia verá quien realmente lo defiende y entenderá que defender a la burguesía francesa en sus alianzas imperialistas no es defender a Francia.

La familia, la religión, el orden y la propiedad son las consignas de la derecha y también pueden ser de la izquierda desde su posición, si es necesario se les quitan, pues todas ellas se encuentran ante la amenaza del gran capital empresarial que deteriora las bases de las sociedades y del individuo que para poder maximizar sus ganancias. La derecha lleva hasta al colmo su afán de lucro, no respeta nada, solo a su ambición; sin embargo esa misma ambición los conducirá a la extinción pues conlleva su propia depravación, descomposición y desintegración como clase.

 

Oscar Rodríguez E. 10 de julio de 2024



Esta nota ha sido leída aproximadamente 1164 veces.



Oscar Rodríguez E


Visite el perfil de Oscar Rodríguez E para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes:


Notas relacionadas

Revise artículos similares en la sección:
Internacionales


Revise artículos similares en la sección:
Actualidad