NUEVA YORK (AP): “En un momento de definición para el capitalismo estadounidense, el presidente Barack Obama condujo el lunes a General Motors Corp. hacia la protección por bancarrota y puso al gobierno al volante de la compañía que simbolizó alguna vez la fuerza económica de la nación…...El gobierno tendrá una participación del 60% en la empresa y un papel sin precedentes en su reorganización. Asimismo, el gobierno canadiense asumirá un 12,5%, mientras que el Sindicato Automotriz recibirá un 17,5% de acciones y los dueños de bonos no asegurados recibirán el 10%....El gobierno proporcionará a GM 33.300 millones de dólares adicionales para ayudarle a reestructurarse, además de los 20.000 millones que ya le prestó el Tesoro. GM también obtendrá 9.500 millones de Canadá…”
Qué opinan de esta noticia los economistas empresarios venezolanos y los intelectuales y políticos neoliberales que recién nos visitaron y dictaron cátedra en la celebración de los 25 años de CEDICE, sobre las bondades del capitalismo y la libertad empresarial, embasurando los espacios televisivos y las primeras planas de los periódicos, con ataques arteros que tildaron de “dictadura comunista” a la política nacionalista del Gobierno revolucionario, quien, a brazo partido y a pesar de las limitaciones y fallas, intenta rescatar de la “ineficacia y voracidad capitalista” un conjunto de empresas y latifundios; muchos de ellos improductivos, especuladores, acaparadores que en su mayoría han medrado a la sombra del erario público de origen petrolero con el uso y abuso de las divisas preferenciales que el Estado otorga, sobreprecios, subfacturaciones, contrabando y que de paso siguen empeñados en promover acciones subversivas y desestabilizadoras, como es el caso del empresario RAFAEL ALFONZO HERNANDEZ, presidente de la empresa INDELMA denunciado ante la Fiscalía 53, desde hace tres años por el presunto delito de contrabando cometido en el comercio ilegal de 25.000 tm de maíz amarillo, y quien fungió como ANFITRION Y LIDER EMPRESARIAL del evento de CEDICE denominado “EL DESAFIO LATINOAMERICANO: Libertad, Democracia, Propiedad y Combate a la Pobreza”.
Todos los días
y semanas se acusa a nuestro Presidente de autoritario y de dirigir
un Estado forajido porque se ve obligado a intervenir, en muchos
casos “temporalmente” a nombre del Estado, en la reconfiguración
del aparato productivo, con la finalidad de garantizar productos y servicios
básicos al alcance de la población, en gran parte excluida, como es
el caso de la nacionalización de las empresas eléctricas, recuperación
de CANTV y SIDOR, Cementeras, empresas contratistas de servicios
básicos para la empresa petrolera, arroceras, empresas de sardinas
abandonadas y otras empresas de alimentos para el pueblo desasistido
etc. etc.
Es el momento oportuno de exigirles a todos estos sesudos economistas, políticos y operadores de oficio al servicio innoble y antipatriótico de vaticinar a diario la hecatombe económica y política de nuestro país, que expliquen y reconozcan desde sus guarimbas mediáticas y pasquines, que Chávez está en el camino y razón correcta al gritar a los 4 vientos que el Capitalismo Salvaje nos lleva a la destrucción y que el mismo se ha cimentado en la explotación y expoliación de los pueblos, en el intervencionismo, en una falsa democracia, menos libertades y una gran dictadura dirigida por los especuladores financieros amparados en una mediática globalizada que minuto a minuto nos aliena y empobrece intelectual, cultural y económicamente.
El Presidente Obama se ve obligado a profundizar en una política intervencionista, que ya había iniciado el genocida e innombrable antecesor, quien inyectó sin condiciones especiales la cantidad de 800 mil millones de dólares a un grupo de protegidos Banqueros e inversionistas, que de esa manera salvaron e incrementaron sus fortunas en detrimento de millones de estadounidenses que quedaron en la calle, nacionalizando de esta manera la pobreza. Por lo menos en el caso de Obama, en esta última decisión, se han cuidado algunas formas y se ha destituido a los directivos de la GM y a dedo ha nombrado interventores para preservar el empleo de casi 60.000 trabajadores que estaban a punto de quedar en la calle.
Cualquier parecido con un Gobierno “Comunista” o Chavista es pura coincidencia