Las lágrimas del presidente Lukashenko, son las lágrimas con el mismo sabor y textura que le brotan al pueblo venezolano de continuo. Son lágrimas que nunca olvidaremos, lagrimas del pueblo bielorruso que encargaron a Lukashenko derramarla en suelo venezolano. ¡Gracias Lukashenko por tanto amor!
Esa es la muestra más palpable de lo que nuestro Comandante Chávez viene haciendo por la humanidad en todas las latitudes del mundo. Son lágrimas que comprometen al Pueblo y al Gobierno venezolano a no permitir bajo ninguna circunstancia, trastabillar en los principios y planes de la revolución que enseñó nuestro Líder Eterno.
En mi particular caso, las lágrimas del presidente bielorruso se me clavaron en el alma y se encadenaron al riachuelo que también mis ojos no paran de producir hace días; de la misma forma que la lluvia de lágrimas del pueblo que ama al Comandante brota sin de descanso, trayendo a mi memoria el convencimiento que, LOS MAJESTUOSOS RÍOS DE LA TIERRA SE NUTREN CON MILLONES DE RIACHUELOS QUE EN SILENCIO BAJAN DE LAS LADERAS. Acentuando Lukashenko con sus lágrimas, que el pueblo de Hugo Chávez, forma con su dolor el Rio que calmará la sed de los sedientos, que formarán el Rio como la gran CALLE DEL MUNDO donde transitamos los hombres y mujeres de todas las condiciones sociales buscando caminar hermanados.
Buscamos caminar con todos los hombres y mujeres de buena voluntad, convencidos que la utopía de un mundo más justo es posible porque así lo creyó el Comandante Chávez y nos enseñó a nosotros.
¡Gracias presidente Lukashenko por tanto amor! Que el “Dios macro” de todo lo existente te siga concediendo la dirección correcta para dirigir a tu pueblo, de la misma forma que nuestro Comandante Chávez continúa enseñando la ruta a nosotros los venezolanos y al mundo. ¡Gracias Lukashenko por tanto amor!
¡Viva el Presidente Eterno carajo!
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