EMPLAZAMIENTO PARA NO SALTAR LA TALANQUERA, MI COMANDANTE.

A la colectividad en general –incluidos hiperchavistas e hiperchavecistas- debemos darle un poco de contexto sobre la polémica recientemente desatada entre nosotros, los intelectuales de izquierda y el hiperlíder. Esta situación comenzó a suscitarse desde el día en que el presidente nos pidió salir de nuestras interesantísimas discusiones del Celarg para trasladarnos al parque el Calvario en el centro de Caracas. Los que nos siguieron por la tele, seguro evidenciaron nuestro desconcierto y es que ¿acaso no será suficiente con mantenernos en el Anauco Suites en lugar del Alba Caracas?

Con todo y la precariedad a la que nos somete el hiperliderazgo de Chávez, hemos respaldado con estoicismo este proceso. Hoy, consternados ante las punzantes declaraciones del hiperlíder de la revolución bolivariana el pasado domingo. Convocamos una reunión extraordinaria en función de manifestar nuestra postura como gremio bajo los siguientes términos:

1. Señor hiperlíder, tenga presente que nuestras declaraciones no fueron en contra suya sino en contra de la pléyade que lo acompaña en el alto gobierno y de la cual nosotros, aunque tengamos varios años viviendo en el Anauco Suites, cobrando por distintas vías en las instituciones de la estado burgués, acaparando espacio en medios de comunicación del estado; no formamos parte.

2. Tenga presente camarada hiperlíder que, si usted hubiera atendido la invitación a participar de nuestro encuentro, lo más probable es que nos habría revestido del prestigio al que estamos acostumbrados. Nuestras declaraciones sólo se dieron al chocar de frente con el abandono. No quedo otra que pasarnos por un ligero desliz. Por ello presi, lo exhortamos a no detener el financiamiento a las tan pertinentes investigaciones que adelantamos, las publicaciones que nos adeuda y a mantener nuestros espacios de masturbación ideológica, pues somos capaces de desatar una descomunal movilización de intelectuales de izquierda en contra suya. Ya verá cómo nuestra fuerza es capaz de poner en jaque a sus hiperchavistas, hiperchavecistas y otras despreciables especies que lo acompañan.

3. Créanos señor hiperlíder que, sus declaraciones lo que han hecho es consolidar este gran frente de intelectuales, al cual ya se suman todos los revolucionaros internautas que mantienen vida activa desde sus escritorios proyectándose al mundo por páginas como aporrea, rebelión y otras que irrestrictamente apoyan no a su proceso sino a nuestro gremio.

4. Entienda señor hiperlíder que, cuando esgrimimos nuestros argumentos lo hicimos luego de recoger el sentir popular de las masas que lo apoyan. Hablamos por los que nadie escucha y viven apabullados por esos funcionarios que no justifican su sueldo al no cuestionarlo. Nosotros, pese a no pensar sí justificamos nuestro sueldo y los gastos que se emanan del dinero de todos los venezolanos al repetir los cuestionamientos que el pueblo llano, ¡asco! acertadamente hace al proceso de cambios que se adelanta desde su hipeliderazgo.

5. Por otra parte señor hiperlíder, manténganos a raya de sus hiperchavistas e hiperchavecistas y del pueblo que lo sigue ¡asco otra vez! – llámese Mario Silva, la gente de las esquinas calientes y los activistas del PSUV- que seguramente comenzarán a exponer sus desencuentros con nosotros y quizá a producir actos de violencia hacía algún notable agremiado aquí. Sepa también, que por cada declaración adversa que emitan en contra nuestra, surgirán cientos de textos que nos apoyan y destruyan cualquier intento de manifestar desacuerdo hacía nuestras posturas. Entienda que, por la vía de la opinión pública no nos amilanarán porque nosotros somos la opinión pública.

6. Finalmente, tenga presente que estamos dispuestos a negociar y si tenemos que sacrificar a ese tal Monedero para mantener intactos nuestros privilegios, de seguro lo consideraríamos, pues ese señor por su apellido nunca nos ha inspirado confianza. No se vea esto como una actitud de traición sino como nuestro recurrente anhelo de supervivencia en la revolución de la que nos sabemos columna vertebral.

Así pues señor hiperlíder, estamos dispuestos a continuar nuestro respaldo bajo los mejores términos y sin formular agresiones recíprocas.

P.D: Por enésima vez señor hiperlíder: le hacemos llegar, junto con este documento el manual de protocolo y etiqueta que usted siempre se ha negado a seguir.

Siguen firmas ilegibles

hectfruiz@hotmail.com