En medio de una coyuntura de disputa política, donde la polarización esta en carne viva. Los medios de comunicación audiovisual están jugando un papel demasiado importante, pero esta vez no precisamente por contraponer dos modelos políticos que siguen en lucha y que nunca han dejado de estarlo. Sino por omitir todo lo que está ocurriendo a nivel nacional. El ignorar la disputa, en la calle, de la renta petrolera y del poder político, parece ser ahora la nueva línea editorial no solo de los medios privados sino también de los medios del estado.
Mientras del lado del gobierno se sigue bajo el ya gastado y cansón argumento de la paz y el diálogo, la derecha se sigue movilizando, destruyendo varias zonas del país con una impunidad preocupante, colocando sus matrices e imponiendo su política en el aspecto comunicacional, no solo a nivel nacional, sino también internacional. Porque a pesar del cerco mediático que existe en la actualidad a través de medios audiovisuales en el país, han entendido la magnitud del poder mediático que tienen las redes sociales, acompañadas de servicios como el de you tube. La derecha esta arropando estos mecanismos, posicionando su política y haciéndola parecer como verdadera, pues no hay nadie que trate masivamente si quiera de desmontarle sus argumentos. Videos que con solo dos días de publicados tienen más de 700 mil visitas, miles de “likes” y con una política claramente liberal burguesa, capitalista, muchas veces fascista y sin duda en pro de fortalecer la matriz de inestabilidad política que beneficie a la oposición para seguir presionando al gobierno y aunque muchas de estas matrices puedan ser fácilmente desmontables, en el marco de lo que quiere y apoya realmente el pueblo venezolano, como ha sido demostrado luego de 15 años de revolución y desde aquel tan recordado caracazo. NO ES UNA POLITICA DE ESTADO, NI DE GOBIERNO HACERLO.
Sí, hay muchos discursos, la mayoría de ellos por no decir todos, enfocados al diálogo por la paz, que sus efectos siguen siendo invisibles para los venezolanos, que aunque no ven en las noticias la violencia reflejada, la viven a diario en diferentes partes del país. En todos los canales del estado la situación mostrada pareciera ser normal, muchas veces hasta fantasiosa, incluso ridículamente increíble. Mientras la derecha que está en la calle continua haciendo literalmente, lo que le da la gana y la izquierda se desmotiva pues no hay una reacción definitiva por parte del gobierno para que esto acabe, ni tampoco para que lo problemas que existen en el país (inseguridad, escasez, especulación, etc.) que afecta a todos; pero principalmente al pueblo humilde, dejen de existir.
Todo el aparato comunicacional que se creó precisamente con la finalidad de ser la ventana de aquellos que históricamente no tenían voz, o en la acción más concreta, por lo menos contrarrestar la hegemonía de la derecha en este aspecto, NO LO ESTÁ HACIENDO y si esporádicamente se hace, es con un trato delicado, suave y blandengue, todo en “ánimos del diálogo y la paz”. El gobierno aparentemente quisiera hacernos creer que vivimos en el país de las maravillas, donde no hay problemas económicos en el país y la derecha no está en la calle, mientras paralelamente se está dejando arrinconar por una oposición capitalista, de derechita, derechota, derecha, ultra derecha o como la quieran llamar, que quiere que cada vez más gobierne para ellos y menos para el pueblo.
Afortunadamente a lo largo de los años mientras se creaba todo este aparato tecnológico del estado, también se creó toda una red de medios alternativos y populares donde la mayoría apuestan y creen en la profundización de la revolución, que no creen en medias tintas, neutralismos, estancamientos, ni conciliación con la derecha. Donde se sabe que la lucha es de clases y además también se sabe cuál es el enemigo de clase; a pesar de que éste quiera desdibujarse acatando los llamados de diálogo del gobierno.
Vayamos pues tod@s a través de estos medios a dejar bien en claro en que creemos y con que estamos de acuerdo, que NO ES precisamente con Lorenzo Mendoza y su política liberal burguesa disfrazada con palabras bonitas, que en definitiva atentan contra muchos logros obtenidos en revolución y contra la clase trabajadora.
Abordemos también las redes sociales y todos los mecanismos de comunicación donde podamos expresarnos, no continuemos omitiendo e ignorando lo que sucede, mientras la coyuntura nos está pasando por arriba y la política de la derecha se fortalece, teniendo como consecuencia la creación de métodos de negociación.
Además exijamos que los medios del estado creados y reformulados en revolución, cumplan el objetivo para el que fueron creados y no sirvan sólo como mecanismos propagandísticos y panfletarios. Ahora más que nunca luchemos en contra de una derecha que quiere por cualquier vía gobernar o que gobiernen para ellos y además luchemos para que de haber un viraje en la política del gobierno, no sea precisamente para ellos, sino al contrario hacia la profundización del socialismo, que se la juegue con los trabajadores y no con la burguesía, que debata con los protagonistas reales de la economía del país, que avance con el pueblo y no con los cocodrilos que aunque sean viejos o parezcan jóvenes, nunca querrán el beneficio de las mayorías sino su beneficio individual.
Ahora más que nunca, NI BUROCRACIA NI CAPITAL, SOCIALISMO Y MÁS REVOLUCIÓN