Desde el día miércoles cuando Ramos Allup convocó a una rueda de prensa en las oficinas del CEN del desaparecido partido AD, los ¡y que dirigentes! de la ¡y que oposición! andaban en ascuas a la espera de lo que diría la chillona guacamaya del otrora ¡y que glorioso! “partido del pueblo”. Y fue así como los mencionados líderes no podían casi contener las ganas de estar presentes en la citada rueda de prensa, pero ni pensar en acudir a la misma aunque fuera a “pescuecear” ya que la batuta la llevaría el que no se deja provocar y además, el sitio escogido fue su propia oficina, la cual pese a sus dimensiones modestas, tenía cabida más que suficiente para todos los periodistas que acudieron, los cuales se encontraban amuñuñados alrededor del glorioso líder.
Después de oír al devaluado líder los ¡y que! de la ¡y que! se sintieron aliviados del calor de las brasas y ,en su lugar, les cayó como una ducha helada en virtud del rapapolvo que recibieron que de haber asistido los hubiera hecho salir con el rabo entre las piernas una vez más, pero esta vez por las palabras de uno que hasta ese momento se había identificado con ellos y ahora estaba claramente marcando distancia al tirarles una granada de esas que se utilizan en los juegos de guerra y guardarse la espoleta, tal como lo hacen los que lanzan artefactos de este tipo y como había hecho unos días antes en ese inmueble..
Muchas de las cosas que dijo dejaron tan malparada a los ¡y que! que los medios que cubrían la fuente y los representaban, no esperaron a que terminara la ronda de preguntas, para no quedar peor, sino que hicieron una pausa, se hicieron los locos y se retiraron, pero ya el pajarraco había graznado, dejándole en claro al auditorio que la supuesta ventaja que aquellos se adjudicaban era pura paja y que a lo largo de todos los procesos electorales que se habían registrado en estos diez años, el crecimiento que habían experimentado siempre había resultado inferior al experimentado por el gobierno, así como que en las oportunidades en que se había reducido el caudal electoral (siempre a expensas de la abstensión) el descenso de ellos había sido mayor que el del gobierno, todo ello a pesar de los malabarismos numéricos que habían querido hacer creer al pueblo su “crecimiento sostenido”.
Otra cosa que dejó muy en claro fue que en ese “baile de alacranes” en que se había convertido el grupo de dirigentes, la posición de AD, como tradicionalmente la ha mantenido con sus propios candidatos, será la de NO APOYAR aquellos que ya se habían enfrentado a Chávez y salido con las tablas en la cabeza, lo cual deja automáticamente fuera del juego al viejo Salas Römer y al filósofo del Zulia y despeja el camino a su propia candidatura.
Como a mi me simpatiza extraordinariamente la candidatura de changallup, le voy a sugerir, para resolver sus problemas, que le haga una invitación a todos los posibles candidatos de la ¡y que! y cuando estén todos reunidos haga regar bastante gasolina en un círculo alrededor de todos ellos (sin que se den cuenta), y después él, con cualquier pretexto, se retire disimuladamente y, al salir del círculo de gasolina, deje caer un fósforo (ningún artefacto explosivo) y verá como se desesperarán los precandidatos, creyendo que van a ser alcanzados y consumidos por el fuego, y terminarán clavándose en la espalda sus propias ponzoñas antes de que esto ocurra, tal como lo veíamos hacer a sus congéneres cuando éramos niños. De esta manera, nunca más volverán. Y seguro que él tampoco.
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