Estas reflexiones las hago con motivo del trabajo de campo presentado en conjunto por el portal aporrea y YVKE MUNDIAL titulado: Día del Médico: Una fecha digna en Revolución.
http://www.aporrea.org/actualidad/n152677.html
En esta muy buena exposición de lo que ha significado el médico; y me disculpan, pero me voy a referir unicamente a los míos, a los venezolanos, el médico venezolano, para el proceso revolucionario, que le ha dado dividendos no sólo en el campo de lo social y de lo humanitario a la población venezolana y no venezolana residente en el país e incluso más allá de sus fronteras, sino también dividendos en lo político al proceso revolucionario traducido en votos, les faltó, el mal trato que el profesional de la medicina; el que labora para el Estado, recibe de sus gobernantes.
No descansaré en denunciar por el medio que sea, que hoy, a 11 años del proceso revolucionario, se han violado y se siguen violando los derechos laborales del médico venezolano. En este país se han discutido, religiosamente, todas las contrataciones colectivas vencidas de los trabajadores de la industria petrolera; más no así, con los médicos que le prestan su servicio al Estado, indistintamente de como esta se llame; bien sea Barrio Adentro, Ministerio del Poder Popular para la Salud, IVSS, IPASME, gobernaciones o alcaldías.
Es BOCHORNOSO, los miserables salarios que devenga un médico; es indigno que se le ignore en su justa aspiración de contar con un contrato colectivo marco que dignifique en lo social, con planes de vivienda y justas jubilaciones, a mis colegas médicos.
Es bochornoso que el salario del médico, esté sujeto a la voluntad del presidente de la república; de cuando a él se le ocurra un buen día que hay que aumentar esas migajas de estipendios y no por el producto de una sincera y justa discusión de un contrato colectivo; contratos que no los inventamos, sino que están contemplados como derechos laborales en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.
Parece paradójico, pero en un sistema de gobierno que enarbola las banderas del socialismo, en donde por esencia privan los derechos del trabajador, es en ese sistema, en donde se han producido las más aberrantes violaciones a esos derechos; sino díganme, que razones que no vayan más allá de lo político y del capricho presidencial, pueden privar para no sentarse a discutir nuestro contrato colectivo vencido desde más de una década. ¿Dónde está la justicia social? ¿Dónde el socialismo?
SI USTEDES, HUBIESEN TOCADO ESTOS TEMAS EN SU TRABAJO CON MOTIVO DEL DÍA DEL MÉDICO, MIS PALABRAS HUBIESEN SIDO DE FELICITACIONES.
Un saludo y me despido con mi grito de protesta.
¡El que tenga oídos, que oiga!
(*)Médico
elieceralvarado@hotmail.com