¡Sayonara, Japón! ¿Ya terminó el juego capitalista?

Para la vida planetaria, para los seres humanos, para el pasado, presente y futuro, ¿qué significa el cataclismo de Fukushima?

En primer lugar hay que preguntar, ¿qué saben miles de millones de habitantes en esta Tierra, en Venezuela, América, África, Asia y Oceanía, de la realidad global en estos momentos? El verdadero conocimiento científico y filosófico no se adquiere genéticamente, no es un don o un regalo divino y tampoco cae como néctar divino o maná sagrado de los cielos contaminados. Probablemente miles de millones de trabajadores nunca se enterarían de la verdad filosófica ni adquirirían los conocimientos científicos acerca de su ser y existencia terrenal.

Si hubiésemos estudiado conscientemente por ejemplo la historia de Venezuela o de las Américas, entonces descubriríamos fácilmente, que no sólo las ideas dominantes de cada época son las ideas de las clases dominantes ... que se están difundiendo sobre todo a través de los procesos de socialización, la educación, la cultura, la religión y la ideología ... sino también que la verdad y el conocimiento dominante de cada época son la verdad y el conocimiento de las clases dominantes, que se difunden por los medios de comunicación internacionales, que siembran confusión, distorsión y adoctrinamiento y que cosechan mentiras, engaños, control físico y mental.

Hoy la única verdad que se acepta a nivel mundial es aquella sancionada por las Naciones Unidas, es aquella que sale de los cañones corporativos en forma de balas de uranio empobrecido, es la radiación atómica 'terrorista'.

Conocer la verdad de nuestra época es bastante simple: sólo hay que escuchar los políticos, leer los diarios, ponerle atención al hombre común en la calle o escuchar los educadores.

Según el famoso psiquiatra burgués mecánico materialista Sigmund Freud "nadie tiene derecho a obligar a otros a actuar según su propio punto de vista de la verdad."

Sin embargo, insistió en que una condición sine qua non para la libertad era conocer la verdad. En el holocausto mundial actual, en el Moloch corporativo de Murdoch del control físico y mental, autoritario y totalitario, global y globalizado, para miles de millones de trabajadores, para los 'condenados de la tierra', resulta casi imposible reflexionar, pensar, teorizar y filosofar acerca de la realidad, existencia y trascendencia histórica planetaria.

Sabemos lo que significa '¡dale!' o '¡conchale vale!' y sabemos hacer la señal de la cruz en cuantas oportunidades se nos presentan, pero la mayoría de nosotros, especialmente los jóvenes, no tienen ni la más remota idea de lo que es por ejemplo la fusión de un reactor atómico, que es HAARP, la Operación Paper-Clip, Dien Bien Phu, el 'Manchurian Candidate', el zeitgeist, el apartheid, Chernobyl, las 'chemtrails', ni quien es Marx, que es la geoingeniería o el plutonio y peor aún, a veces ni conocen la diferencia entre un rectángulo y un cuadrado. Progresivamente y a pesar de todas las 'noticias' y la 'educación' que nos rodean, nos están extinguiendo como homo sapiens sapiens, nos están desinformando hacia una especie de homo ignorans, lo que impide o por lo menos dificulta enormemente nuestra trascendencia hacia el homo novum.

Hay un vínculo dialéctico con el brutal proceso capitalista histórico de la perpetua acumulación capitalista de la clase dominante - con la violencia, el terror, la piratería, los privilegios, el poder y el vandalismo que lo caracteriza - que ha venido acompañando los amos y perros de la guerra a través de los milenios en su desarrollo de mecanismos , maquinaciones y mentiras en la superestructura para controlar y destruir el pensar humano de sus 'herramientas que hablan', de sus 'sujetos', con el fín de impedir que esos entiendan las verdaderas ramificaciones de la explotación natural y humana, la dominación política, la discriminación social, el racismo, el 'humanismo militar' y la 'dominación de espectro completo', es decir, la alienación humana total.

Es dentro de este espectro transhistórico donde tenemos que ver y ubicar el fascismo global actual, que hoy eufemísticamente se le llama 'humanismo' o 'globalización'. No es pura casualidad que los actuales montajes beligerantes estadounidenses, las mentiras abiertas y descaradas de la OTAN y la arrogancia de sus 'comandos' militares terroristas ocurren paralelamente al colapso de un proceso planetario que, como todos los procesos terrenales hechos por el hombre, merecen perecer.

Todos esos ataques militares criminales contra países como Libia, ahora también contra Costa de Marfíl y quién sabe cuándo le toca a Venezuela, demuestran el dacaimiento material y social de una cultura destructiva como la de los países metropolitanos del norte. Y en la medida que va muriendo, se va agudizando, se vuelve más violenta y más terrorista.

El capitalismo no es nada absoluto, no es la última verdad ni mucho menos es perfecto; su existencia no es eterna y hoy presenciamos su decadencia vertiginosa, su 'fundición total'. En un esfuerzo desesperado, parecido al de Dorian Gray, intenta rejuvenecer su obsolescencia, pero todo en vano, y como en el caso del Rey Midas, todo lo que toca se convierte en una 'diarrea de oro'. Este su modo de destrucción ya ha alcanzado niveles barbaros y se está destruyendo a sí mismo en una reacción en cadena suicida.

A estas alturas del deterioro corporativo y del terrorismo apocalíptico, cuando hemos llegado a una época de mera supervivencia, entre otras cosas, ¿qué todavía vale la pena estudiar, reflexionar y tener en cuenta?

Hoy más que nunca tenemos que hacer uso de un arma realmente invencible: nuestro cerebro.

Tenemos que:
* entender de una vez por todas que "más vale un pájaro en mano que cien volando", que la vida terrenal es única, que es "hermosa y por tanto hay que disfrutarla al máximo" (Trotski);

* liberarnos de las telarañas religiosas e ideológicas del oscurantismo y comenzar a transiluminar la autopista cósmica hacia la verdadera emancipación humana anticapitalista;

* crear contenidos de anticipación para nuestros conceptos y categorías de emancipación, por ejemplo, para la revolución, la lucha de clases, la producción, el trabajo, el capital, el socialismo, el marxismo, el proletariado, el imperialismo o el fascismo;

* descubrir la verdadera amenaza apocalíptica en la que nos encontramos en esta etapa del proceso de trabajo, de acumulación de capital y de la historia de la clase dominante;

* recordar que el ex presidente estadounidense Bush padre por lo menos una vez en su vida le dijo a la humanidad entera una verdad cataclísmica sobre el globofascismo y el venidero 'gobierno único mundial' post orweliano, cuando dijo que "si el pueblo norteamericano llegaría a saber lo que hemos hecho, entonces nos colgarían a todos en los postes de luz"; (1)

* saber que 'colgar en los postes de luz' a dirigentes políticos individuales como Hussein o Khadaffi, no detendrá la inexorable y nefasta caída libre del capitalismo en su propio atolladero. Por más importante que sean los grandes hombres o algunas élites poderosas, pero a solas, fuera de las relaciones amo-esclavo, no pueden acumular ganancias, hacer historia y llevar a cabo guerras ecocidas y genocidas en el norte de África o el Oriente Medio;

Ahora algo en cuanto al desastre nuclear de Fukushima.

Sin el conocimiento y las medidas concretas necesarias para combatir accidentes como el ocurrido en Chernobyl un cuarto de siglo atrás, sin escrúpulos y con ese hambre voraz e insaciable por la explotación, las corporaciones poderosas estaban y siguen construyendo cientos de reactores atómicos en todo el mundo. Ante los recientes acontecimientos de los reactores nucleares fundidos en Fukushima, no hay más nada que decir sino ¡Sayonara, Japón! y simultáneamente, ¡adiós 'homo sapiens'!

Actualmente existen unos 500 reactores atómicos en el planeta Tierra de los cuales cada uno podría traer los mismos peligros que viviamos con Chernobil y que están siendo generados actualmente en Fukushima. En resumen, Japón cambiará para siempre. Hoy se sabe que el desastre de Chernobyl ha cobrado ya un millón de vidas humanas preciosas e inocentes, desde que ocurrió el accidente hasta la actualidad. Durante las próximas décadas, millones de japoneses y otros pueblos perecerán como consecuencia del cáncer y de enfermedades relacionadas con las sobredosis radiactivas recibidas durante el accidente en Fukushima, que todavía sigue en pleno desarrollo. A las élites gobernantes del poder global esto no les importa un pito, por el contrario, están planeando reducir la población mundial de cerca de 7 mil millones de seres humanos a sólo 2 mil millones. Esto equivaldría a un Holocausto a la enésima potencia.

El gobierno japonés, junto a la giga corporación General Electric y la Tokyo Electric Power Company (TEPCO) - con la correspondiente ayuda de las campañas de desinformación por parte de los medios de comunicación mundiales - han cubierto el peligro, del cual Marx y Engels habían advertido ya en 1848 en su Manifiesto, con un manto de silencio.

Desde el propio comienzo de este tragedia nuclear producida por el hombre, los responsables, dueños de la planta atómica en Fukushima, han perdido completamente el control sobre ese demonio (tal vez llamado HAARP), que fue evocado desde el mundo inferior capitalista para tratar de maximizar una vez más las extra ganancias de las corporaciones globales. Como resultado de la depresión global la economía japonesa, que ha sido un baluarte capitalista corporativo en el Lejano Oriente, ahora está en ruinas.

En el fascismo mundial al igual que en el capitalismo no existen los amigos, porque se trata de una guerra permanente entre las fuerzas beligerantes de las corporaciones por la hegemonía global. Ahora le tocó a Japón sufrir los golpes del hacha de la competencia inexorable, la centralización, la concentración y monopolización. Japón trató de entrar en el gran negocio militar de las potencias atómicas, de poseer bombas atómicas y ahora fue aniquilado. Además, Japón trató de neutralizar la lucha de clases en casa, que ahora se ha convertido en una lucha por la mera supervivencia .

Por lo tanto, ¿cuáles son los elementos principales del cataclismo de Fukushima?

* Este desastre horrible de Tokio durará meses, antes de que de alguna manera podría ser 'controlado', la radiactividad en las islas generada por la 'bomba sucia' del plutonio, sobrevivirá a la humanidad; la vida media del plutonio 239 es de 24000 años.

Lo que sí es cierto es que cada día que va pasando, los niveles de radiación se vienen disparando hacia niveles máximos. Más y más radiactividad contaminará a los 35 millones de personas en la región de Tokio, que se encuentra sólo a 160 millas de distancia de Fukushima:

"La consecuencia inevitable de esto serán dramáticas restricciones de la vida cultural, social, comercial y económica de la gran megalópolis de Tokio. A medida que más y más personas abandonan a Tokio, esa ciudad se convertirá en la sombra radiactiva de lo que era antes. Por supuesto, las consecuencias económicas para las finanzas y el comercio global son enormes, Tokio es uno de los tres centros principales de las altas finanzas en el mundo, junto con Londres y Nueva York, por lo que su abandono tendrá ineluctables repercusiones que estremecerán la civilización mundial moderna hasta en su médula." (2)

¿Sabíamos que 25 gobiernos extranjeros ya han cerrado sus embajadas en Tokio? ¿Que otros se han mudado a Osaka para tratar de escapar de la radiación atómica? ¿Todavía recordamos que el 17 de marzo la Marina de los EE.UU. había considerado la evacuación de su personal de 87000?

Sí, de verdad la situación es muy grave.

Pocos días después, el "19 de marzo el Ejército de los EE.UU. ha comenzado una evacuación voluntaria de hasta 200000 efectivos militares y sus dependientes de Japón." (3)

Banqueros internacionales están huyendo, están saliendo del país radiactivo.

La verdad es simplemente que la evacuación de Fukushima, de Tokio, de Japón ya ha comenzado. El siguiente paso sería evacuar a todo el planeta.

¡Sayonara, Japón! Como dijo Marx:
"El capital vino a este mundo chorreando de la cabeza a los pies, de cada poro, con sangre y suciedad". ¡Ahora deja a Japón empapado en sangre y suciedad radiactiva! ...

Alea jacta est ... ¿Terminó el juego? ¿Queremos y podemos despertarnos ahora mismo para aniquilar el capitalismo?
___________________________________
(1) (http://www.threeworldwars.com/nwo-timeline1.htm)
http://www.franzlee.org.ve
franz@franzlee.org.ve


Esta nota ha sido leída aproximadamente 7053 veces.



Franz J. T. Lee


Visite el perfil de Franz J. T. Lee para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes:


Notas relacionadas