En estos primeros cables destaca la obsesiva campaña de EEUU contra la Misión Barrio Adentro, así como un odio visceral contra el noble y hermoso trabajo de cooperación que realiza la hermana República de Cuba en nuestro país para llevar la salud y educación a todos los rincones del país, demostrando además una paranoia enfermiza contra la isla revolucionaria, expresada en términos totalmente anacrónicos de la Guerra Fría
En un primer cable publicado por Wikileaks, la Embajada de EEUU se hace de los servicios del Presidente de la Federación Medica Venezuela y de un periodista del diario El Universal dedicado al tema de la salud, para arremeter contra las políticas que el gobierno bolivariano viene llevando a cabo de manera exitosa para brindar atención medica integral a los más necesitados.
Precisamente, el indiscutible éxito de Barrio Adentro parece haber causado una gran frustración en el Departamento de Estado, a juzgar por los lamentos expresados en varios cables al ver que su campaña de propaganda anticastrista llevada a cabo por sus cipayos oposicionistas tiene poco asidero en la sociedad venezolana.
En efecto, en un cable fechado en enero de 2006, la Embajada de EEUU se muestra frustrada con la oposición venezolana por no ser lo suficientemente eficaz en denunciar la presencia de cubanos en Venezuela, particularmente en Barrio Adentro, admitiendo que los pocos esfuerzos de algunos opositores en crear resentimiento contra los cubanos “tiene poca resonancia en los pobres de Venezuela.” No obstante, reconoce que Primero Justicia ha sido consecuente con los intereses estadounidenses en desplegar la propaganda “anticastrista” en el país, conjuntamente con otros connotados reaccionarios.
En un cable fechado el 12 de febrero de 2010 y otro del 6 de abril de 2009, la Embajada de EEUU en Caracas da por ciertas las informaciones malsanas de la prensa nacional sobre un supuesto acoso y maltrato contra los médicos cubanos de la Misión Barrio Adentro que han solicitado visa ante la Embajada de EEUU para viajar a Miami. EEUU además asegura que las cifras de las personas atendidas por Barrio Adentro son infladas y que a los médicos que allí laboran se les obliga a realizar trabajo político, además de toda una serie de patrañas que buscan minar los esfuerzos del gobierno bolivariano en saldar la enorme deuda social que dejaron los regímenes puntofijistas.
La Embajada de EEUU también prende las alarmas por los acuerdos bilaterales y que en el marco del ALBA ha suscrito Venezuela para la administración de dos puertos, valiéndose entre otros de las denuncias que a la propia Embajada llevó el ex presidente de la Cámara Petrolera de Venezuela, Andrés Duarte, y en otro cable del 28 de enero de 2010 informa sobre las reuniones periódicas de “contrainteligencia” que tienen lugar en su Embajada, y en las cuales han expresado preocupación por ser victimas, junto a la oposición venezolana, de la inteligencia cubana.
En el contexto de la convalecencia de Fidel Castro y la nueva presidencia de Raúl Castro, la Embajada de EEUU en Caracas se atreve a afirmar que es el momento oportuno para advertirle a Venezuela que no intervenga en lo que el Departamento de Estado asumió como una “transición” en Cuba. Incluso, luego de “analizar” el valioso apoyo estratégico de Fidel Castro al Presidente Chávez durante el golpe del 11 de abril y en el contexto del referendo revocatorio que le permitió, según ellos, la permanencia en el poder, tiene la desfachatez de expresar de la manera mas cínica y desvergonzada, que la ausencia de Fidel en el poder “podría ser un ventaja para nosotros en nuestros esfuerzos para urgir un retorno a la democracia completa en Venezuela”, lo cual es prueba fehaciente de sus esfuerzos golpistas en derrocar al legítimo gobierno bolivariano.
Además de la “amenaza cubana”, estos primeros cables de la Embajada de EEUU en Caracas publicados por Wikileaks, destacan un informe sobre la situación de la banca nacional tras la apertura del Banco Bicentenario, donde la misión estadounidense no parece del todo confiada en el sistema bancario nacional tras producirse la intervención de algunos bancos, aun cuando expertos consultados por la propia Embajada le restan importancia a dichas intervenciones. En este sentido, llama la atención que un “respetado” economista antichavista, cuyo nombre no revela Wikileaks, se haya comunicado directamente con la Embajada estadounidense el 17 de diciembre de 2009 para advertir que “varios bancos de tamaño medio o grande (o sus propietarios) estaban colocando sus activos en dólares en cuantas colaterales en Florida a cambio de préstamos de emergencia en bolívares”. La Embajada estadounidense incluso admite que la situación del Banco Federal para la fecha era una incógnita, toda vez que es un banco “considerado débil por varios expertos,” y que incluso recibió prestamos de emergencia por parte del gobierno.
En otro cable, la Embajada de EEUU desestima que Venezuela en realidad esté despachando uranio a Irán, como lo han afirmado connotados apátridas venezolanos y el gobierno de Israel, gracias a las opiniones vertidas directamente a la Embajada por parte de un físico nuclear venezolano cuyo nombre Wikileaks no ha revelado, aun cuando un cable firmado por el ex embajador William Brownfield, fechado el 7 de abril de 2006, le da más credibilidad a esta patraña y prende las alarmas por la estrecha cooperación de Venezuela con un país que apoya el “terrorismo”. No obstante, en otro cable similar, la Embajada estadounidense admite haberse reunido el 2 de diciembre de 2008 con tres científicos venezolanos en el único laboratorio en Venezuela completamente funcional de investigación de física nuclear ubicado en la Universidad Simón Bolívar, uno de estos científicos por cierto, educado en Rusia y de origen cubano, dice el cable, y otro científico que era el segundo al mando del laboratorio.
Otro cable del 2 de noviembre de 2009, la Embajada de EEUU informa al Departamento de Estado sobre un desayuno realizado el 28 de octubre de ese año con la Junta Directiva de la Confederación da Asociaciones Israelitas Venezolanas, en el cual le manifestaron sus “preocupaciones” por el acercamiento de Venezuela con Irán, y además informaron sobre sus esfuerzos para que los senadores de Brasil ratificaran el ingreso de Venezuela a MERCOSUR y de esta manera evitar que nuestro país solo se relacionara con los países del ALBA.
Si bien hasta ahora estos cables ofrecen poca información sobre las acciones antivenezolanas y anticubanas desprendidas por la Embajada de EEUU en Caracas, lo que sí demuestran es la total falta de escrúpulos para fundamentar sus informes exclusivamente en reportajes de los medios oposicionistas venezolanos y opiniones de connotados antichavistas, que luego remiten al Departamento de Estado para que sus autoridades digieran la información manipulada y emitan sus destempladas declaraciones contra el gobierno bolivariano, las cuales además son nuevamente recogidas por los medios golpistas en una suerte de reciclaje de la información para fines conspirativos.
Increíble que clasifiquen a estos cables como “secretos” o “confidenciales” cuando lo que hacen es repetir las mentiras de los medios golpistas apátridas.
Eugenio Carrasco
Cables:
http://cablegate.wikileaks.org/cable/2009/12/09CARACAS1551.html
http://cablegate.wikileaks.org/cable/2010/02/10CARACAS187.html
http://cablegate.wikileaks.org/cable/2010/01/10CARACAS107.html
http://cablegate.wikileaks.org/cable/2009/12/09CARACAS1595.html
http://cablegate.wikileaks.org/cable/2009/09/09CARACAS1181.html
http://cablegate.wikileaks.org/cable/2009/06/09CARACAS728.html
http://cablegate.wikileaks.org/cable/2009/04/09CARACAS442.html
http://cablegate.wikileaks.org/cable/2009/01/09CARACAS26.html
http://cablegate.wikileaks.org/cable/2006/08/06CARACAS2367.html
http://cablegate.wikileaks.org/cable/2006/01/06CARACAS219.html
http://cablegate.wikileaks.org/cable/2009/11/09CARACAS1401.html
http://cablegate.wikileaks.org/cable/2006/04/06CARACAS958.html
